Una no escoge

Una no escoge el país donde nace; pero ama el país donde ha nacido.

Una no escoge el tiempo para venir al mundo; pero debe dejar huella de su tiempo.

Nadie puede evadir su responsabilidad.

Nadie puede taparse los ojos, los oidos, enmudecer y cortarse las manos.

Todos tenemos un deber de amor que cumplir, una historia que nacer, una meta que alcanzar.

No escogimos el momento para venir al mundo: Ahora podemos hacer el mundo en que nacerá y crecerá la semilla que trajimos con nosotras.















viernes, 25 de junio de 2010

Camila O´Gorman: símbolo del amor castigado por la hipocresía social



En este programa, que puede escuchar aquí, incursionamos en la vida y el drama de Camila, una joven que se jugó por amor y fue castigada. Duramente penada por una sociedad pacata, hipócrita y de doble moral.
Reflexionamos sobre como aún hoy, tantas historias deben ser ocultadas o abortadas por estúpidas convenciones sociales, falsas moralinas que ocultan la verdad oscura de la sociedad.

Perdimos a Saramago


Perdimos a Saramago. Un hombre tan “diabólico” por polémico para algunos, a partir de su visceral sinceridad y su vocación por los pobres, de su crítica no a la fe, sino a su institucionalización como poder. Un tipo formidable que rotó siempre las manecillas de su compromiso social hacia el Sur.
Cuenta una periodista cubana que le había entrevistado, allá en su casa de la comarca Tías, en Lanzarote, que la sorprendió el hecho de que todos los relojes de su casa estuviesen detenidos en las cuatro de la tarde. Y que, ante la razonable pregunta, él desnudó su pasión. Era la hora exacta en que se había dado cita, por primera vez, con Pilar, mujer que le acompañó en el último tramo de su existencia y a la cual calificó como “centro de mi vida”.
El hecho de que el Nobel de Literatura haya decidido que su cuerpo llegue (¿su “final morada”?) a su Portugal natal, venido precisamente desde Islas Canarias, habla de la necesidad humana de todos de retornar a la raíz. De manera que sus cenizas cumplirán con aquel viejo bolero donde reza: “Recuerda que desde el polvo hemos venido/ y hacia el polvo iremos a parar…”
Reza el parte médico que José Saramago falleció el viernes, a los 87 años, a causa de una leucemia. Lo creo, los glóbulos rojos de su sangre fueron quedando escondidos, tras la letra impresa, como provocación de pensamiento, como aguja que hurgaba siempre en “las venas abiertas de América Latina”, descubiertas por otro escritor, para transfundirnos las utopías y las esperanzas de un mundo posible superior al que yace grave ahora.
Si los millones de lectores que tenía en este continente hubieran podido ponerle sangre de su sangre, el cuerpo estuviera, a esta hora, todavía vivo, pero quizás el mito que es habría muerto, porque en la grandeza de los Misterios de Dios y esta pequeñez humana radica, precisamente, el primer átomo de eternidad, cuando hemos sido capaces, con nuestra actitud ética y nuestras acciones, de construir al menos una huella que ofrende al sacrificio de Jesús al subir al Gólgota.
Cuentan que al llegar el féretro al edificio de la municipalidad donde sería velado, arrancó un tsunami de aplausos y lágrimas, mientras dos carteles gigantescos, desde su fachada, lo decían todo con una simple frase: “Gracias, Saramago”, en medio de una sensación de orfandad por la ausencia no solo de un gran literato que supo hacernos mirar en derredor con ojos propios, sino por un paradigmático ser humano ético y agudo crítico del tiempo histórico, que nunca detuvo sus reflexiones como hizo con los relojes de su casa, porque, en este caso, se trataba de un amor que debía reinventarse constantemente.
Considerada América Latina como Templo de Dios, no dudó en tomar el látigo de su palabra para expulsar, desde esa rica geografía, a los mercaderes de la prostitución del poder y las jerarquías, de una cultura consumista que pretendía sepultar los verdaderos intereses de los pueblos.
Su proverbial reflexión fue siempre implacable saeta contra todo tipo de dominación que fuera en contra de la condición humana, viviendo la agonía de navegar entre sus amorosos seguidores (los más) y sus enconados detractores que vivían siempre (¿por pura casualidad?) en los barrios altos y en las “casitas” que detallara, en una de sus memorables canciones de finísima ironía, el cantautor chileno y mártir Víctor Jara.
Enemigo de actitudes ambiguas o complacientes, Saramago fue una especie de Quijote “desfaciendo” entuertos de una letal cultura de la resignación, frente a la invisible bomba atómica de nuestro tiempo: la globalización capitalista, viniera esta de las grandes estructuras de gobierno o fabricada desde los púlpitos y las iglesias.
Su “proverbial ateísmo”, como calificaron algunos su manera de expresarse fue, precisamente, su modo de ver la fe desde la perspectiva de una izquierda que nunca renuncia a las utopías de un orden mundial justo y de paz, de manera que, pienso yo, tendrá Dios que volver a colocar su balanza y medir los quilates de espíritu tan singular.
Pruebas para absolverlo de cualquier pecado sobran: Manual de pintura y caligrafía; Casi un objeto; Levantado del suelo; Memorial del convento; La balsa de piedra; Historia del cerco de Lisboa; El Evangelio según Jesucristo; Ensayo sobre la ceguera; La caverna; El hombre duplicado; Ensayo sobre la lucidez; Las intermitencias de la muerte y Caín.
Neruda, Benedetti, Vallejo, Juan Ramón Jiménez, Lorca y hasta el propio Cervantes deben estar esperándolo, desde esa otra desconocida geografía del “mundo prometido” por Dios, para hacerlo miembro de su Real Academia de la Lengua. Acá hasta Caín está de luto. Nos deja una llovizna en los ojos, a pesar de la sequía de los despiadados cambios climáticos y, a diferencia de los de su casa, los relojes de los sueños (¡gracias a Dios!) no se han detenido. Como mismo él dijera, “Nuestra única defensa contra la muerte es el amor.”

Texto de José Aurelio Paz para ALC Noticias

Recordamos algunas de sus infalibles textos:
En el fondo, todos tenemos necesidad de decir quiénes somos y qué es lo que estamos haciendo y la necesidad de dejar algo hecho, porque esta vida no es eterna y dejar cosas hechas puede ser una forma de eternidad.

Resulta mucho más fácil educar a los pueblos para la guerra que para la paz. Para educar en el espíritu bélico basta con apelar a los más bajos instintos. Educar para la paz implica enseñar a reconocer al otro, a escuchar sus argumentos, a entender sus limitaciones, a negociar con él, a llegar a acuerdos. Esa dificultad explica que los pacifistas nunca cuenten con la fuerza suficiente para ganar… las guerras

miércoles, 16 de junio de 2010

Programa del 15 de junio


En este programa tratamos la historia de María Eugenia Castro, de quien ya colocamos aquí el resumen. En la sección actualidad hablamos del Trabajo Infantil, por haber sido el 12 de este mes el Día Mundial contra el trabajo infantil, flagelo aún del mundo.

Pueden escuchar en este link el programa

Aquí, el informe que compartimos:



“El 12 de junio del año 2002, bajo el patrocinio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se instituyó el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, siendo la primera realización mundial contra el trabajo de chicos, hecha con el objetivo de concientizar a la ciudadanía sobre el problema que representa el trabajo de millones de niños, niñas y adolescentes en el mundo”

Conceptualizacion del trabajo infantil
Se entiende por trabajo infantil a toda actividad económica y/o estrategia de supervivencia, remunerada o no, realizada por niñas y niños, por debajo de la edad mínima de admisión al empleo o trabajo, o que no han finalizado la escolaridad obligatoria o que no han cumplido los 18 años si se trata de trabajo peligroso

Faltan políticas estatales contra el trabajo infantil

El secretario general de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), Gerónimo Venegas, sostuvo hoy que "el Estado debería tener políticas contra el trabajo infantil". Venegas reconoció que la rural "es una actividad donde hay muchos chicos trabajando, que deberían estar yendo a la escuela y jugando".

A su criterio, "hay que seguir trabajando" para combatir este flagelo, y consideró que "la erradicación del trabajo infantil pasa esencialmente porque los estados tengan políticas en su contra". "El Estado debería tener políticas en contra del trabajo infantil, del trabajo en negro y de la mano de obra indocumentada pero no que los trabajadores de otros países se vayan, sino que regularicen sus situación laboral y no compitan deslealmente con los argentinos", subrayó Venegas.

Venegas hizo estas declaraciones luego conocerse que uno de cada cinco niños trabaja en zonas rurales, cifra que es superior a la registrada en áreas urbanas. Según un estudio, el 13,3 por ciento de los niños menores de 9 años trabajó en algún momento en zonas rurales, mientras en las ciudades lo hizo el 6 por ciento.

El relevamiento se hizo en 2004 y 2006 y demostró que la inserción laboral de los de entre 5 y 13 años afectó sus logros escolares. En Argentina la ley 26.390 sobre Prohibición del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente dispuso desde el 25 de mayo de 2010 el impedimento para ejercer actividades laborales a menores de 16 años.

La Encuesta de Actividades de Niños, Niñas y Adolescentes (EANNA) del Ministerio de Trabajo reveló que en zonas rurales de Argentina uno de cada cinco niños trabaja o trabajó con anterioridad al relevamiento.

La incorporación temprana al trabajo es más frecuente en el medio rural que en zonas urbanas, sostuvo el informe que se hizo en 2004 en el gran Buenos Aires, Mendoza, la subregión del NEA: Salta, Jujuy y Tucumán, y la subregión del NOA: Formosa y Chaco, y en 2006 en la provincia de Córdoba.

Por ejemplo, en Mendoza un programa piloto que incluyó a 914 niños de 0 a 14 años permitió visualizar las condiciones de vulnerabilidad y desprotección a las que están expuestos por ser hijos de trabajadores rurales. La Subsecretaría de Trabajo y Seguridad Social de Mendoza comenzó a implementar el plan "Buena Cosecha" en Guaymallén, San Carlos, San Martín, Santa Rosa, Tunuyán y Tupungato, a fin de poder tener datos sobre estos niños.

En el primer trimestre de 2010, de las 60 empresas que inspeccionó el Estado mendocino, nueve tenían a chicos trabajando. Además, se encontró a 150 adolescentes realizando tareas en el campo. Por su parte, en Santa Fe se hizo un relevamiento cualitativo del trabajo infantil y adolescente, a cargo de un estudio realizado por la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) y la Oficina Argentina de la OIT. El objetivo fue identificar las característica fundamentales del trabajo infantil en los distintos lugares de la provincia para promover políticas de radicación. En Santa Fe, el trabajo que hacen los niños se da principalmente en la cosecha de algodón y las ladrilleras del norte provincial.

Fuente:dyn/www.visionfederal.com

-----------------------------------
Trabajo infantil rural

Diferentes estudios relacionados con la situación rural han mostrado la significativa disminución de la población económicamente activa agraria. El significado del trabajo infantil en el medio rural podrá comprenderse con más facilidad si se aprecia que, junto con este retraimiento de la mano de obra rural, se ha producido un aumento porcentual de la fuerza laboral de los menores en el campo argentino.
Una de las modalidades habituales de inserción de los niños en las actividades laborales es el trabajo junto a los padres, sobre todo en aquellas familias en que los adultos perciben un salario por un trabajo a destajo. Esta modalidad de trabajo con incorporación de niños es muy frecuente en ciertas actividades de la cosecha y en los primeros procesamientos de ciertos productos agrarios, en floricultores y horticultores.

Incorporación temprana
Los niños se incorporan a realizar actividades a una temprana edad, primero para cuestiones relacionadas con el mantenimiento del hogar, como el cuidado de los más pequeños del núcleo familiar. A los seis o siete años, los niños comienzan a colaborar en la cosecha del tomate y de la frutilla. A los once o doce años comienzan sus tareas aplicando agroquímicos con mochila.
Agrotóxicos
Es necesario considerar que entre los agroquímicos que los menores utilizan se encuentran algunos de gran toxicidad, tales como el heptacloro o el bromuro de metilo. A los trece o catorce años, ya trabajan regularmente en las quintas, aunque ya antes y durante los meses en que se agota lo producido por la explotación, el menor sale de su hogar para realizar changas en otras explotaciones.
Consecuencias
Ya se mencionó una de las consecuencias que el trabajo precoz tiene sobre los niños: los peligros para su salud ante el uso frecuente de sustancias peligrosas para ella y la escasa protección que los menores utilizan en aquellas tareas. Otras consecuencias se refieren a las deformaciones que sufren los menores al exponer su cuerpo en desarrollo a esfuerzos físicos prolongados y excesivos.
Rendimiento escolar
Las consecuencias también se sienten en el desempeño escolar. En estudios realizados, las familias declararon que realizaban esfuerzos para que sus hijos asistiesen regularmente a la escuela. Pero estos intereses se ven dificultados en épocas de cosecha. Las escuelas de la zona informaron que los niños generalmente se atrasan en la escuela, por lo que finalmente terminan desertando.
Conclusiones
Se debe hacer referencia a la ausencia de indicadores que midan la real magnitud de esta problemática. No es tan sólo un problema de los instrumentos de medición. Se trata que: las características que asume el trabajo de los niños en las tareas agrícolas, muchas veces adquieren características que hacen difícil su percepción. En particular, puede hablarse de la invisibilidad de estas tareas, por cuanto la prestación de servicios alejados de las ciudades, distantes de rutas o accesos, o en lugares impenetrables, imposibilita el conocimiento de la situación existente. Pero también se da una suerte de naturalización de sus formas, pues, para las familias rurales, por la tradición cultural, es algo natural que sus hijos menores ayuden en las tareas laborales de los adultos y, muchas veces, se considera que trabajando desde niño se aprenderá mejor el trabajo de sus padres, valorizándose como más favorable este tipo de formación que la que puedan recibir en la escuela.

La mano de obra infantil es más barata

Y no sólo por la exigencia de un menor salario, sino fundamentalmente porque al ser ilegal, solo puede darse en el sector informal y en consecuencia, sobre la remuneración no deben cargas sociales ni administrativas, ni seguros computables.
Para la familia rural es natural que sus hijos trabajen. Muchas veces consideran que la pobreza y el trabajo manual es parte de su destino. Muchas veces consideran que trabajando desde niño se aprenderá mejor la tarea y más preparado se estará para ganarse el sustento.

Las normas jurídicas son pensadas y desarrolladas para el ámbito urbano. De igual manera, los planes y programas sociales han apuntado a los sectores urbanos con el objeto de maximizar beneficios con el menor costo posible.

El sector rural es uno de los caracterizados como invisibles, como aquellos a los que no puede llegar ninguno de los servicios de inspección. La relación no permanente en el ámbito rural constituye la circunstancia que más favorece el trabajo infantil. Es de difícil constatación ya que los períodos de duración de este tipo de relación laboral son muy cortos. Pueden ser de horas o días y, al igual que en el sector urbano, la precarización de las relaciones laborales se ha incrementado en forma constante.

El trabajo de los niños se da en el marco familiar. Sólo excepcionalmente los menores de 14 años trabajan sin los padres. Gran mayoría de las actividades rurales que involucran familias cuyos niños y niñas trabajan son del tipo intensivo y estacional. Esto se traduce en contratos precarios, de escasa duración y con gran concentración de trabajadores. La remuneración es medida por el rendimiento. Esto implica que no existe una remuneración individual para el niño, sino que el fruto de su tarea es computada en el conjunto de su familia y pagada a quien la encabeza. La pobreza genera trabajo infantil que impide la educación y la calificación, siendo a su vez causa de nueva pobreza.

El trabajo infantil en el sector rural de la argentina (Unión Argentina De Trabajadores Rurales Y Estibadores - UATRE)

Trabajo infantil urbano

(Extracción del Programa para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil Urbano en la República Argentina)

Los procesos de urbanización de las últimas décadas han elevado de forma substancial el volumen de niños y niñas trabajadores en las grandes urbes. El INDEC da cuenta que en Argentina un 53% de personas que residen en los grandes conglomerados urbanos están por debajo de la línea de pobreza y muestran que en todo el territorio nacional los niños y niñas pertenecientes a hogares pobres constituyen el 72,3%. Las tasas de desocupación llegan al 21,5 %, las de subocupación demandante al 12,7% y las de subocupación no demandante al 5,9% (1). Los barrios carenciados - villas de emergencia- las casas tomadas y los inquilinatos constituyen una de las expresiones más extremas de la pobreza urbana. Sus habitantes son en su mayoría inmigrantes de zonas rurales, de pequeñas ciudades del interior del país o de otros de la región.
Bajo estas circunstancias los niños y niñas quedan en situación de mayor vulnerabilidad, expuestos a riesgos de abandono, migraciones forzadas, incorporación laboral temprana, afectando sus derechos.
Los trabajadores infantiles urbanos, se hallan mayoritariamente en el sector informal y constituyen un núcleo considerable de quienes realizan trabajos en forma dependiente o independiente en condiciones de gran precariedad, de riesgo y sin cobertura. Estas condiciones de vida dificultan el acceso a la educación y a la atención de salud adecuada. El Trabajo infantil urbano tiene como características más relevantes la informalidad e ilegalidad, y se desarrolla en los conglomerados urbanos.

Las modalidades que más asume esta problemática en el ámbito urbano son:
Mendicidad; recolección de residuos en la vía pública (cirujeo); venta ambulante; reparto de estampitas en medios de transporte; venta de productos o flores en bares y restaurantes; acompañantes de adultos que venden o mendigan en transportes o en la calle; el realizado en empresas; microempresas o subsidiariamente en grandes empresas; el trabajo doméstico en hogares de terceros o en el propio en ausencia del los padres en forma habitual; la explotación sexual con fines comerciales, la pornografía y el turismo sexual; tráfico de drogas; servicios a automovilistas en la vía pública (limpia vidrios, abre puertas, malabaristas, etc.); lustrabotas; tallerismo.

Fuente: http://www.trabajo.gov.ar/conaeti/
comisión nacional para la erradicación del trabajo infantil- Ministerio de Trabajo y seguridad social de la nación

Eugenia Castro: usada, olvidada....hoy, tantas Eugenias!

Si el título dice “Mujeres que hicieron historia” una supone que sólo hablará de aquellas que aparecen en los libros, las estampas, los museos...pero no, hay mujeres que hicieron parte de la historia pero han sido escondidas y olvidadas porque su papel no es lo suficientemente “digno” o “relevante” para aquellas plumas que dicen qué se debe leer, saber, recordar.

Eugenia Castro es apenas esbozada en algunos libros de autoras que buscan rescatar voces olvidadas. Susana Bilbao, escritora paceña, la evoca en “Amadísimo Patrón” y María Sáenz Quesada en “Las mujeres de Rosas”. Se la recuerda como “la manceba de Rosas”. El término manceba no es inocente. El vocablo deriva del latino mancĭpus que siginifica “esclavo”; actualmente la Real Academia Española dice en su sexta acepción “concubina”, y en ese sentido debe entenderse a Eugenia Castro, pero también su historia está cerca de la esclava.

La relación de esta joven con Juan Manuel de Rosas viene de los tiempos en que su esposa, Encarnación, estaba en los últimos meses de vida. La niña fue puesta en manos de los Rosas porque su padre, soldado de la Confederación, viudo y enfermo, la dejó como pupila. La relación fue siempre asimétrica, signada por el poder del hombre gobernador sobre una inocente huérfana.

La belleza y humildad de la muchacha fue un imán para el gobernador quien, a pesar de poder tener a mujeres de cualquier índole, decide esta relación. ¿Por qué? podemos pensar en la necesidad de ocultar sus amoríos ante los ataques de los unitarios, pero más podemos imaginar el egoísmo propio de quien sólo piensa en sí mismo y con esta cómoda relación “puertas adentro” puede satisfacer sus necesidades físicas y emocionales sin compromisos de ningún tipo. ¿A quién puede importarle el futuro de una pobre muchacha sin familia y sin protección? A Rosas, no, evidentemente, aunque por momentos hasta parece que la ama.

Eugenia empieza a dar a luz. Primero una hija, bautizada Mercedes, cuya paternidad se atribuyó a un sobrino de Encarnación Ezcurra, para salvaguardar la honorabilidad de la pareja, ya que el hecho sucedió antes de la muerte de la esposa. Después nacerán de la unión: Angela (1840), Ermilio (1842), Nicanora (1844), y más tarde Joaquín y Justina.

La relación duró desde 1839 hasta la batalla de Caseros en 1852 y siempre se mantuvo oculta, aunque quienes transitaban la quinta de Palermo, sabían qué sucedía.

“Rosas la quería, en la medida en que su narcisismo se lo permitía, es decir, dando lo menos posible, como un patrón generoso más que como un amante entregado a su amor. Ella lo idolatraba, sorprendida tal vez al ver que el hombre más respetado, temido, querido y odiado de la Confederación durmiera noche tras noche con ella y fuera el padre de sus hijos. No recibía a cambio más que unos pesos mensuales, además de la vestimenta y la comida. Nada les faltaba a Eugenia y a sus hijos. Nada les sobraba tampoco. Ella, desinteresada, ingenua, ignorante de las artimañas de la política, jamás pensó en asegurarse el futuro como suelen hacerlo las queridas de los gobernantes. El, convencido de la grandeza de su linaje, no imaginó siquiera que podía reconocer a sus hijos naturales y asegurar el bienestar de Eugenia”, dice María Sáenz.

Eugenia le cebaba mates, lo atendía en su rito de afeitada-dato no menor en tiempos donde el cuello de Rosas era un bien preciado para varios sectores del país-, probaba la comida del gobernador y escuchaba sus confidencias en el lecho.

El escritor José Mármol, fervoroso antirrosista, denunciaba: "El, Rosas, hace de su barragana la primera amiga y compañera de su hija; él la hace testigo de sus orgías escandalosas..." Lo cierto es que Manuelita la aprecia, pero nada hace cuando parten al exilio. La abandona también y cuando, años después (1886) los descendientes de Eugenia exigen sus derechos ante el regreso de la hija legal al país, nada consiguen de ella.

Cuando Rosas cae, en Caseros, parte al exilio en un buque de guerra inglés y ofrece a Eugenia llevarla a Gran Bretaña junto a dos de sus hijos, sus preferidos, Ángela y Emilio. Ella no acepta; ¿cómo dejar a sus otros cinco niños?. Tenía 32 años y se encontraba nuevamente embarazada.

Entonces, empezó el calvario de Eugenia y la relación asimétrica mostró la verdad. Los biógrafos dicen que la joven se comportó con lealtad, hizo los mandados que le encargó el ex dictador y se empeñó en sacar algunos objetos de Palermo; entre ellos, el recado favorito de Rosas. Adrián, su séptimo hijo y el postrero de estos amores, nació pocos meses más tarde en la estancia de una familia amiga y es probable que ella tuviera que darlo, debido a que no estaba en condiciones de atenderlo bien, dice Saénz.

En Inglaterra, Rosas pasa necesidades ya que el gobierno nacional le incauta los bienes. Eugenia le escribe varias veces pidiéndole ayuda o recordando el compromiso asumido de mandarle una mensualidad para atender las necesidades de sus siete hijos menores, Rosas deja pasar años sin contestar. Luego de un largo y significativo silencio, le escribe para quejarse de su estado de pobreza, de las injusticias que estaba padeciendo y de la "maldita ingratitud" de Eugenia. De este modo, la hacía responsable de la decisión de quedarse.

"(...) Reciba mil recuerdos de las muchachas que no se olvide de ellas y de mi parte le deseo mil felicidades y que no se olvide de esta pobre desgraciada (...). Sin más molestia soy de usted como siempre su humilde criada.” dice Eugenia en una de sus misivas a Rosas. Siempre seguirá viéndolo como su patrón, hecho que él y Manuelita recalcarán a fin de evitar reclamos pecuniarios y de origen. Rosas no reconoce por escrito a los hijos e hijas que tiene con la Castro, por lo que ella y sus descendientes mueren en la pobreza, la humillación y el abandono. Eugenia Castro falleció un año antes que Rosas, con apenas 52 años.

Su historia pone luz sobre tantas miles y miles de historias similares, de niñas puestas como criadas y usadas como objetos sexuales, para ser luego abandonadas y humilladas, preñadas o llenas de hijos. Mujeres que se convierten en víctimas de hombres más o menos poderosos, pero que ejercen con ellas, la violencia propia de quien tiene impunidad, solo porque el machismo imperante sigue avalando estas historias de dolor e injusticia y las esposas, hijas, hermanas, tantas veces cómplices en el silencio, seguimos callando, puertas adentro del hogar.

Programa del 8 de junio


En este link podrán escuchar el programa del 8 de junio, donde abordamos la historia de Manuela Rosas y Ezcurra y la situación social en Sudáfrica,a dos días del inicio del Mundial 2010.

martes, 1 de junio de 2010

28 de mayo- Día de la Salud de las Mujeres



La fecha se instituyó en 1987, durante la campaña para la prevención y reducción de la Mortalidad Materna que impulsaron grupos de mujeres de todo el mundo vinculadas al movimiento de salud. Desde entonces, la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe (RSMLAC ha coordinado las campañas que se desarrollan cada año. El objetivo es promover acciones de exigencia e interpelación a los Estados y otros actores sociales con responsabilidad en la salud sexual y reproductiva de las mujeres, para que esos derechos sean efectivamente respetados y garantizados.


TENES DERECHO A:

Recibir educación sexual integral.

Acceder a los distintos métodos anticonceptivos en forma totalmente gratuita.

Decidir si tener hijos o no, la cantidad y el intervalo entre los nacimientos.

Acceder a una atención gratuita, integral y de calidad de tu salud sexual y reproductiva.

Recibir información y orientación completa, clara y veraz sobre tu cuerpo, sexualidad y métodos anticonceptivos para poder tomar decisiones informadas.

Disfrutar de una vida sexual saludable y placentera, libre de todo tipo de coerción y violencia.

Reclamar ante la amenaza o vulneración de algunos de estos derechos.

LINEA GRATUITA DEL MINISTERIO DE SALUD DE LA NACION ARGENTINA

En el 0800-222-3444, quince profesionales brindarán información y responderán de manera confidencial las inquietudes de quienes llamen.

Programa del 18 de mayo

El martes 18, fue nuestro tercer programa. En el hablamos de Mariquita Sanchez de Thompson, una dama de la historia nacional, olvidada en su rol de educadora, luchadora, escritora.
En el bloque de actualidad, hablamos del rol subordinado de la mujer y el papel que ha jugado las lecturas e interpretaciones del cristianismo desde los inicios hasta la época colonial (aclaro que hablo del cristianismo porque es lo que conozco, hablar de otras religiones, sería desde la ignorancia)

Puede escucharnos aquí


LOS PROCESOS DE EXCLUSIÓN DE LAS MUJERES HAN EXISTIDO EN TODOS LOS ÁMBITOS SOCIALES, CULTURALES, ECONÓMICOS, HISTÓRICOS… Y, TAMBIÉN, EN EL RELIGIOSO QUIZÁ CON MÁS FUERZA POR TRATARSE DE UN PATRIARCADO HEREDITARIO Y PERDURABLE POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS.

El cristianismo ha creado, en su generalidad, una imagen de la mujer negativa, machista y patriarcal.
Las historias bíblicas de la creación fueron interpretadas como colocando a las mujeres en un estado permanente de sumisión a los hombres, como forma de castigo.
Los Padres Latinos de la Iglesia hacían a las mujeres responsables por traer el pecado original al mundo, y por ser constante fuente de seducción.

Las mujeres continuaron siendo condenadas por los teólogos medievales. En los tiempos post-escolásticos, encontramos una verdadera "misoginia" e incluso persecución.

Textos bíblicos mal interpretados
La costumbre de ciertos escritores cristianos, de culpar a la mujer del pecado surge de una desigual interpretación de los textos de las Sagradas Escrituras.
• Génesis 3:1-16 describe la caída de Adán y Eva. Ella fue seducida por la serpiente e hizo que Adán comiera de la manzana. Ambos fueron amonestados por Dios, quien dijo a Eva: "Multiplicaré tus sufrimientos en los embarazos. Con dolor darás a luz a tus hijos, necesitarás de tu marido y él te dominará." La sumisión de la mujer al hombre fue interpretada como una específica e innescapable maldición de Dios, en vez de un justo ejemplo de cómo las penurias de la vida son consecuencia del pecado: así como Adán tendría que trabajar la tierra con el sudor de su frente. (Génesis 3:17-19)...El tema es que ahora, además de parir...trabajamos!!!

• 1 Timoteo 2:14 culpa la mujer (Eva) de haber engañado a Adán, y por ende, haber sido responsable del pecado. Este texto es claramente una racionalización la cual no puede ser tratada como un planteamiento teológico balanceado.

No hay teólogo moderno que interprete estos textos como enseñando que las mujeres son más culpables que los hombres del pecado, o de que el bajo estatus social o cultural de las mujeres sea deseado directamente por Dios como un castigo.

Los Padres de la Iglesia

El Padre griego San Ireneo (140-203 DC) presenta en cambio, una interpretación más imparcial del relato del Génesis. Él culpa al demonio, en vez de a Adán y a Eva. Él sostiene que Adán es más responsable que Eva. Él también muestra gran empatía hacia las mujeres, cuando comenta sobre la súplica de la madre de los dos Zebedeos.

Tampoco San Ignacio, otro Padre griego (murió en el 110 DC), tuvo resentimiento hacia las mujeres. Sí, la caída vino a través de una mujer, Eva, pero la redención vino a través de otra mujer, María. Desafortunadamente, Padres latinos tardíos, como San Juan Crisóstomo (344-407 DC), ofrecieron una interpretación mucho más negativa de la caída y sus consecuencias para las mujeres.

La retórica anti-femenina comenzó particularmente con los Padres latinos. Tertuliano de Cártago (155-245 DC) fue uno de los peores. Lean esta obra maestra suya:
("Cada mujer debiera estar...) caminando como Eva, acongojada y arrepentida, de manera que por cada vestimenta de penitencia, ella pueda expiar más completamente lo que ella obtuvo de Eva, - el estigma, quiero decir, del primer pecado, y aborrecimiento (atado a ella como la causa) de la perdición humana.

‘Con dolor darás a luz a tus hijos, necesitarás de tu marido y él te dominará.’
¿No saben que cada una de ustedes es una Eva? La sentencia de Dios en el sexo de ustedes viven en estos tiempos: la culpa debe existir también por necesidad."

• "¡Ustedes son la puerta del infierno!

• ¡Ustedes son las que rompieron el sello de aquél árbol (prohibido)!
• ¡Ustedes son las primeras desertoras de la ley divina!
• ¡Ustedes son las que le persuadieron (a Adán), pues el demonio no tenía el valor suficiente para atacarlo!
• ¡Ustedes destruyeron tan fácilmente a la imagen de Dios, al hombre!
• Por causa de lo que ustedes merecían – esto es, la muerte – aún el Hijo de Dios tuvo que morir!"

"¿Y piensan en adornarse ustedes mismas y sobre sus túnicas de pieles?" Tertuliano, De Cultu Feminarum, libro 1, capítulo 1.

También San Jerónimo (347-419 DC) culpa a la mujer de la caída de la gracia. Las mujeres sólo pueden superar su culpa teniendo hijos o absteniéndose del sexo y siendo vírgenes.

La condenación de la mujer en la Edad Media

El Decreto de Graciano (1140), del cual la Ley de la Iglesia se basaría hasta el 1917, tomó partido del juicio de Ambrosiaster, que asignaba al estado de sumisión de la mujer su rol en el pecado.

"Ambrosio (=Ambrosiastro) dice: ‘Las mujeres deben cubrirse sus cabezas, porque ellas no son la imagen de Dios. Ellas deben hacer esto como signo de sumisión a la autoridad y porque el pecado entró al mundo a través de ellas. Sus cabezas deben estar cubiertas en la iglesia, para honrar al obispo. De igual manera, ellas no tienen autoridad de hablar porque el obispo es la personificación de Cristo. Ellas deben hacer esto ante el obispo como ante Cristo, el juez, dado que el obispo es la representación del Señor. Por el pecado original, ellas deben mostrarse sumisas’." Decretum Gratiani, Causa 33, qu. 5, cáp. 19.

Por tanto, ninguna mujer puede presumir de mandar sobre el hombre."
El odio hacia la mujer no se quedó en palabras. Las persecuciones que siguieron fueron más allá de la imaginación. Para demostrar esto, considere un libro "católico", "El martillo de las brujas" (Malleus Maleficarum), escrito por dos teólogos dominicos, Jakob Sprenger OP y Heinrich Kramer OP. El libro fue avalado y recomendado por el Papa Inocencio VIII en 1484, y fue usado por siglos. El mismo causó que miles de mujeres inocentes fueran quemadas en la hoguera. Fueron estos honrados, no contradichos y ampliamente citados "teólogos" quienes escribieron:
"Qué puede ser una mujer, sino la enemiga en la amistad, un castigo inescapable, un mal necesario, una tentación natural, una calamidad deseable, un peligro doméstico, un detrimento deleitable, un mal de la naturaleza, pintada de bellos colores."

En el movimiento cristiano, hubo empero, movimientos de igualdad: el valdismo, los cátaros, etc. PERO AL SER MINORIAS, NO PERMEARON LOS ESTEREOTIPOS SOCIALES.

Época Victoriana
La mujer debe ser recatada, moderada, madre, todo un “angel of the home”. El ángel de la casa que NO sale nunca, que sólo está para cuidar y llevar la casa y complacer a su marido en todo. No puede hacer nada que no se salga de los valores morales y tradicionales. Y si alguna se hartaba de todo y quería salirse de la rutina, ¿sabéis qué pasaba? Que los hombres consideraban que estaba “atacada de los nervios” y la encerraban en el desván. De ahí esa conocida “Mad woman in the attic”, es decir, la mujer loca en el ático o desván. Y es que si te salías de los cánones, eras peligrosa y se te consideraba “loca”, por lo que te encerraba tu propia familia en el desván.

Un ejemplo conocido aquí en los primeros tiempos de la patria, es el de la abuela de Camila O´Gorman, la Perichona, una mujer que fue amante del Virrey Liniers, y que pagó su pecado permaneciendo años encerrada en su altillo por “loca”.
Y es que el miedo a la mujer que se rebela y piensa por sí misma, que no sigue los cánones establecidos por los hombres (pues recordemos que nuestra cultura europea es fundamentalmente patriarcal) se extiende por toda la Europa cristiana y luego por América.

Mariquita Sanchez de Thompson: Más que una dama y un himno

Las mujeres fuimos en múltiples ocasiones de la historia humana, las ideadoras de revoluciones para reivindicar los derechos. Génesis de la lucha por causas justas, en defensa de la patria, de los derechos propios, de las pares, de los más débiles, de nuestros hijos y hijas, de nuestros hombres.

Hoy sacaremos el velo de la historia oficial a María de los Santos Sánchez de Velasco y Trillo, conocida como Mariquita Sanchez de Thompson (1786-1868).
Las efemérides de nuestra infancia nos pintaron una mujer bien de época, distinguida, excelente anfitriona, patriótica, bella. La realidad es bastante distinta.

María de los Santos, una niña de la alta sociedad porteña, hija única de padres acaudalados, saldrá del molde femenino del siglo XIX y dejará sentado en la historia algo que los movimientos feministas decimos hoy: lo privado, es público.
¿Cómo? haciendo de sus sentimientos, un debate público.

Hacia 1803 Mariquita Sánchez tenía 14 años, y decidió cuestionar las rígidas costumbres de su época en torno al matrimonio. No aceptó casarse con el hombre elegido por sus padres, el español Diego del Arco. Amaba a su primo, Martín Thompson y ante la intransigencia de sus padres, ella y Martín decidieron llevar el enfrentamiento a la esfera pública. Presentaron un juicio de disenso ante las autoridades virreinales y, finalmente fue el virrey Sobremonte el que dirimió el conflicto, fallando en favor de los enamorados.

El hecho conmovió los cimientos de la tradicional familia porteña. Las madres y padres no escatimaban temores sobre en qué terminaría la sociedad si las jóvenes comenzaban a rebelarse en estos términos.

La historiadora María Sáenz Quesada considera que Mariquita fue expresión de una nueva sensibilidad social: "... en esta lucha de carácter personal los novios no estuvieron solos. En efecto, la cuestión del casamiento con el elegido del corazón era uno de los grandes temas de la vida privada que debatía la sociedad finisecular. Si en Francia acababan de abolirse los privilegios que venían del Medioevo, si el espíritu del siglo tendía a acabar con las herencias gravosas, si los pensadores, literatos y poetas elogiaban el individualismo y la religión del corazón por encima de las frías normas, ¿podrían escapar los súbditos americanos de la Corona española al influjo de tales cuestiones?"

La firmeza de Mariquita al sostener contra viento y marea sus derechos, de los 14 a los 17 años, da cuenta además de una decisión que era fruto de su notable fortaleza, el punto de partida de una nueva sensibilidad social ante el matrimonio: la revalorización del amor de la pareja por encima de los intereses del grupo de familia.

"Aunque no fue el único juicio de disenso de esa década, pues hubo algunos otros de importancia en que los hijos pusieron pleito a sus padres, el de Mariquita y Martín tuvo una repercusión especial. [...] Ella y su novio se habían convertido, sin buscarlo, en pioneros de esta nueva sensibilidad."

Ya anciana, escribió a su hija: “mujer que tiene pasiones tiene mérito y, sea en la clase que sea, tiene corazón y es lo que aprecio”.

Fuentes: Sáenz Quesada, M., Mariquita Sánchez. Vida política y sentimental, Buenos Aires, Sudamericana, 1995. y “Recuerdos del Buenos Aires virreinal", El amor en lucha contra la conveniencia: surgimiento de una nueva sensibilidad